Adolescentes de entre 15 y 16 años, irrespetaron el distanciamiento social y algunos no usaban mascarillas, según relataron agentes de la Policía Nacional que participaron en el operativo del viernes 16 de abril, donde en un inmueble se celebraba una fiesta clandestina.
El hecho sucedió en una vivienda ubicada frente a una Unidad de Policía Comunitaria (UPC) en la parroquia Picoazá de Portoviejo, los agentes encontraron a 30 menores de edad libando.
“La Policía Nacional hizo el respectivo llamado a la Dinapen (Dirección Nacional de Policía Especializada para Niños, Niñas y Adolescentes), asimismo a la propietaria de la vivienda se le hizo la notificación para sanción (económica)”, declaró Lupe González, del departamento de Control Territorial del Municipio. (I)